Un día a la vez, qué triste, pero cierto. Sólo por hoy, me repito. Después de varios meses en equilibrio, sentí el sismo. No encuentro mi lugar.
Situaciones raras, sentimientos encontrados, desesperación y por qué no, frustración. Y es que la gente es tan rara. Que me está haciendo titubear, me está haciendo enojar.
En ocasiones la infelicidad de otras personas nos llega a afectar y es porque te la transmiten, porque de una u otra forma te vomitan su inconformidad con la vida, porque están solos. Necesito concentrarme y terapearme.
Soy feliz con mi vida y con mi familia, y mis amigos, y mis cosas y conmigo.